Brotes en los altos

I

(Barcelona, 2009)

 

 

 

 

En el principio, debió de tratarse de una simple viga saliente, encima del último piso,
de la que colgar una polea para subir los muebles.
Aquí y allá, por la ciudad, aún permanece una polea mecida por el viento.

 

 

Pero casi siempre no hay más que una argolla, de la que colgar
en su momento la roldana.

 

 

 

 

¿En qué momento empezó la viga a enloquecer,
a rizarse hacia el cielo?

 

 

 

 

¿...a cubrirse de adornos, de volutas?

 

 

 

 

¿En qué momento empezó a echar hojitas, ...?

 

 

¿... como si las plantas de piedra y estuco de las fachadas hubieran florecido?

 

 

 

 

 

 

 

 

¿En qué momento empezó a erguirse y a crecer, ...?
(sobre las envolturas que revelan más que ocultan)

 

 

¿ ...a competir en desenvoltura con las plantas?

 

 

 

 

 

 

¿A generar árboles enteros, surtidores...?

 

 

¿A desenvolverse en caprichosas estructuras fractales...?

 

 

 

 

En los caprichos de la luz solar se entrelazan con los motivos
vegetales tallados en piedra.

 

 

La fronda de hierro, la pétrea y la vegetal
en muda competencia en las alturas.

 

A la segunda parte

 

 

Para la vista

 

Creado el  12 de octubre del 2009